domingo, 24 de octubre de 2010

Árboles besados en el Parque Güell

Sí, no lo duden.

Es el Park Güell de Gaudí.

En este bosque virtual aún es mayo, y fue en ese mes cuando volamos a tierras catalanas para pasar unos días con Montse y Fer para "desconectar". El sábado tocó visita oficial a Barcelona, y lo primerito que vimos fue el Park Güell.


Bueno no, corrijo: lo primero que nos llamó la atención fueron grupos de jubilados jugando a la petanca.

Fue una sobredosis gaudiniana la de esa mañana, entre piedras, naturaleza, sol y el gentío.
Supongo que lo vimos y paseamos todo. He aquí una muestra de las postales típicas, como los troncos pétreos haciendo de soportales.


Se imaginan lo que pasó.

Pues sí, besamos a uno de esos troncos danzantes, de los de verdad, pero entre Montse y yo.

Creo que metafóricamente se sellaron unas cuantas cosas...

...además de nuestra alma galega.


Pero seguimos paseando y yo seguí besando algunos de los muchos árboles que iba viendo con otros ojos.

Elegí un olivo que está por el paseo que va a la parte de arriba, por un camino que hace muchas eses y que casi provoca la caída de alguien que se me quedó mirando.

Valió la pena subir, y contemplar estas vistas de un mar soñado que "ya no estaba levantao".


Subimos y bajamos cual turistas totales.

Y me despedí con un beso de palmera interminable.

Tan alta que mis fotografos (también "de altura") capturaron así.

Besé (besamos) varios árboles del Parque Güell
el sábado
15 de mayo de 2010 en Barcelona (Barcelona).



Fotos: F. Prado, A. Metztli y Marthazul

domingo, 10 de octubre de 2010

Abrazo glamouroso contra el cambio climático

Después de unas semanas sin poder sentarme a publicar un beso de árbol, de los muchos que tengo guardados en mis carpetas, hago un pequeño hueco, además de un paréntesis cronológico en mi intento de llevar un orden de árboles besados, para crear mi propia acción en el Día Internacional de Soluciones Climáticas, que es hoy 10 del mes 10 del año dos mil 10. Después de haber recibido un mensaje de Avaaz me uno a la causa con un granito de arena en forma de entrada bloguera, creo que de las más inesperadas.

El año pasado Tomás Salas diseñó un árbol con muchos besos para este bosque, y a comienzos de este me envió otra imagen que le recordó el proyecto al ver una tarjeta de un niño mexicano abrazando a un árbol viejito. Pero la cosa no queda ahí, ya que este verano me dio otra sorpresa desincronizada, pero no por eso menos interesante.

Es la mismísima Marilyn Monroe abrazando un árbol en una sesión de fotos, quizá para alguna de sus promociones. No me considero fan de iconos míticos como Marilyn pero elegí publicar esta entrada hoy como acto personal y metafórico en contra del cambio climático. Por la sencilla razón de que hace 50 años ese árbol estaría mucho más sano que ahora (quien sabe si aún sobreviva)
donde la contaminación está haciendo barbaridades. Una contaminación provocada por todos, y que entre todxs, unos más que otros, deberíamos de frenar. Dicen que corregir es de sabios... y salvar el planeta debería de ser de humanos, y no destruirlo. Yo soy más de hacer en el día a día o de escribir, que de manifestarme en la calle con pancartas y ruidos. Esta es mi manera de protestar y aportar, con palabras y fotos, y un gran toque de glamour, confiando que a la misma Marilyn le guste nuestra colaboración artística y ecológica.


"Curiosamente en estos días me acordé de tu blog de los árboles, porque me encontré esta fotografía donde cierta famosa actriz está abrazando un árbol. Es una lástima que en la fotografía no se adviertan claramente sus  facciones. Por lo que tuve que acompañar otra de la misma sesión fotográfica donde está retratada con su esposo, un escritor muy famoso y muy serio. La foto fue tomada por el fotógrafo Sam Shaw en algún lugar de Long Island. Yo calculo que fue tomada sobre el año 1960. Saludos".
Thomas (julio, 2010).

Fotos: Sam Shaw